Cuando recibimos el diagnóstico de nuestro hijo pasamos por momentos de mucha incertidumbre, estamos perdidos y nos sentimos solos. A medida que pasa el tiempo y que vamos aceptando la condición de nuestro hijo, nos recuperamos y desarrollamos un mayor nivel de autoconfianza, especialmente a medida que vamos informándonos más y conociendo mejor de la condición. Todos somos diferentes, unos nos recuperamos más pronto, otros tardan más, unos adquirimos resiliencia, otros aun están aprendiendo a adquirirla, todo esto está bien y no hay opciones correctas o incorrectas. Pero es esa sensación de sentir que batallamos solos la que más predomina como un común denominador en esta comunidad.
Contar con una tribu, que quizá esté viviendo lo mismo que nosotros o de forma parecida, es un factor importante que también influye en nuestro bienestar. Se trata de conectar con una comunidad que nos entienda, de crear conexiones sinceras de cariño y apoyo mutuo, que nos permita sentirnos acompañados en el proceso.
Los padres neurodiversos no somos los únicos que necesitamos conectar con otros, todos los seres humanos la necesitamos. Nuestros hijos la necesitan, ellos primordialmente son seres hambrientos de conexión y es importante que lo sepamos. Probablemente todo esto que te estoy diciendo te suena a cliché, pero en esta oportunidad te quiero demostrar por qué se habla tanto hoy en día de la importancia de contar con una tribu, para que entiendas mejor de qué va todo esto y así no te quedes solo con el bla bla. A continuación, voy a profundizar más sobre el tema desde mis experiencias de vida, pero sobre todo desde un ángulo más científico, basado en mi formación como Health Coach.
Fue cuando emigré de mi país que aprendí a valorar la importancia de la conexión con otros. Recuerdo que el primer fin de semana que pasamos en este país sentimos tanto yo como mi pareja una sensación de vacío indescriptible. No se trataba sólo de nostalgia por la ausencia de los familiares sino también de esa necesidad de compartir con seres queridos y amigos los sábados por la tarde o en parrilladas los domingos. Se trataba de sentir que tienes personas cercanas a tu alrededor que se preocupan genuinamente por tu bienestar y que cuidan de ti. Nos tomó mucho tiempo adaptarnos a esa nueva vida de fines de semana solitarios mientras hacíamos nuevas amistades.
La pandemia ha sido otro momento que le ha enseñado al mundo entero cuan necesaria es la conexión con otros. Estudios llevados a cabo en USA mostraron que el distanciamiento social trajo como consecuencia un incremento en problemas de salud mental, tales como ansiedad y depresión, a un nivel tres veces mayor que lo observado antes de la pandemia.
Los seres humanos somos criaturas sociales. Desde que nacemos mostramos esa necesidad a través de nuestras ansias por conectar con mamá. Un estudio llevado a cabo en 1970 por el doctor Ed Tronick demostró cuan vulnerables son los bebés a las reacciones emocionales y no emocionales de la gente cercana a ellos. En el estudio se muestra un video de una madre interactuando con su bebé a través del juego mientras le sonríe y luego la madre cambia su lenguaje corporal, deja de sonreírle al bebe y no responde a sus intentos de interacción. Se observa cómo el bebé insiste en la interacción, buscando una respuesta de mamá, finalmente, al no recibir respuesta, el bebé se frustra y comienza a llorar. Es por esto que la interacción con nuestros padres desde que nacemos es un factor elemental para un desarrollo emocional óptimo y qué importante es para nosotros entender esto.
¨Un profundo sentido de amor y pertenencia es una necesidad irresistible de todas las personas. Estamos biológica cognitiva, física y espiritualmente programados para amar, para ser amados, y para pertenecer. Cuando esas necesidades no son cubiertas, no funcionamos como deberíamos, nos rompemos, nos desmoronamos, nos adormecemos, terminamos adoloridos, hiriendo a otros y enfermos¨
Brene Brown
Investigador y Profesor de la Universidad de Houston
¿Qué hace a las conexiones sociales un factor a favor en nuestro estado de ánimo?
Existe evidencia científica que demuestra que cuando abrazamos, besamos, sostenemos manos y tenemos intimidad sexual liberamos oxitocina. La oxitocina es una hormona producida en el hipotálamo y después liberada en la sangre. La oxitocina trabaja en conjunto con otros neurotransmisores, como la GABA (inhibidor de ansiedad), la serotonina (regulador del humor), y dopamina (generador de placer). La oxitocina promueve el estado de relajación y ayuda a reducir los niveles de estrés y ansiedad.
Por otra parte, existe evidencia científica de que el contar con una tribu puede reducir los estados depresivos y mejorar la salud mental en general.
En términos de personalidad y humor, se ha evidenciado que las personas que tienen relaciones sociales de calidad presentan mayores niveles de autoestima, son más empáticos, muestran un nivel de confianza más alto hacia los demás y una mayor disposición a cooperar en comunidad.
El contar con una tribu también influye positivamente en la salud física
Estudios científicos indican que la conexión social de buena calidad puede ayudar a mantener un índice de masa corporal saludable, regular los niveles de azúcar en sangre, disminuir el riesgo de mortalidad por enfermedades cardiovasculares.
Un estudio también encontró que las conexiones sociales de calidad aumentan el chance de longevidad en un 50%. En las llamadas zonas azules, las áreas más longevas del mundo, se determinó que un factor que coincidía en el estilo de vida de los habitantes en estos 7 lugares era que vivían en comunidad, tenían una muy buena relación con los vecinos y se reunían frecuentemente, existía un nexo cercano entre los habitantes basado en amistad sincera y apoyo mutuo.
Estudios también han encontrado que lo contrario a la conexión social, la soledad, tiene también impactos negativos en la salud. Una encuesta determinó que la soledad podría tener efectos nocivos en la salud más contundentes que incluso aquellos relacionados con el uso del cigarrillo.
La calidad es más importante que la cantidad:
La mayoría de los estudios realizados hacen énfasis en que los hallazgos se basan en relaciones e interacciones de calidad. Así pues, se determina que más importante que tener una grande comunidad de amigos es tener un círculo, así sea pequeño, de amistades cercanas en el que exista el cariño y el apoyo mutuo. Se trata de compartir con personas que demuestran interés genuino por nosotros, de ser parte de una comunidad en la que tengamos ese sentido de pertenencia que nos hace sentir realmente valorados y apreciados dentro de nuestro círculo social. Y es que simplemente hacer amistad con una mamá neurodiversa que está viviendo cosas parecidas a nosotros y que nos hace sentir acompañadas y entendidas ya supone un gran alivio.
¿Qué podemos hacer para mejorar nuestra conexión social y crear esa tribu que tanto necesitamos?
- Empieza por casa: Comparte más con tu familia, busca interacciones de calidad con tus seres queridos.
- Únete a una causa: Hacer voluntariado podría ser una buena forma de conocer nuevos padres e incluso profesionales!. Adicionalmente, trabajar por una causa también tiene sus efectos positivos en nuestro bienestar emocional.
- Ofrece ayuda o únete a alguna actividad en tu vecindario: Esto te abre oportunidades para conocer a tus vecinos y quizá conectar con algunos padres neurodiversos.
- Muestra interés por las personas de tu entorno, ofrece ayuda y colabora con ellos, de esta forma puedes generar nexos más cercanos y en la mayoría de los casos se te será retribuido.
En resumen:
Contar con una tribu no sólo te permitirá sobrellevar mejor los desafíos que se te presentan a diario con tu hijo, sino que también contribuirá con tu bienestar emocional y tu salud. Y mientras formas tu tribu, aquí cuentas con una pequeña que te hará acompañamiento siempre que lo necesites, aquí estoy, para acompañarte y hacerte este camino menos pesado y más llevadero. Te abrazo fuerte.
Recuerda suscribirte a mi newsletter, de esta forma podrás recibir comunicación semanal acerca de las diferentes soluciones que podría ofrecerte, además de que te permitirá mantenerte al día con mis nuevos artículos y servicios gratuitos. Hasta la próxima! 😊
Referencias:
- Martino J, Pegg J, Frates EP. The Connection Prescription: Using the Power of Social Interactions and the Deep Desire for Connectedness to Empower Health and Wellness. Am J Lifestyle Med. 2015;11(6):466-475. Published 2015 Oct 7. doi:10.1177/1559827615608788
- Lee WJ, Youm Y, Rhee Y, Park YR, Chu SH, Kim HC. Social network characteristics and body mass index in an elderly Korean population. J Prev Med Public Health. 2013 Nov;46(6):336-45. doi: 10.3961/jpmph.2013.46.6.336. Epub 2013 Nov 28. PMID: 24349655; PMCID: PMC3859855.
- Berkman LF, Syme SL. Social networks, host resistance, and mortality: a nine-year follow-up study of Alameda County residents. Am J Epidemiol. 1979 Feb;109(2):186-204. doi: 10.1093/oxfordjournals.aje.a112674. PMID: 425958.
- The Health Benefits of Strong Relationships – Harvard Health Publishing – Harvard Medical School August 6, 2019.
- Lost Connections, Johann Hari. Bloomsbury Publishing.